Cómo Convertir una Sala de Juegos en un Caos Organizado

cuarto juego ninos

Renunciar a un espacio para convertirlo en una sala de juegos puede sonar como una gran pregunta para algunos padres, pero si tiene un poco de espacio de sobra, ayuda mucho a controlar los desórdenes de los niños al mantener todo en un solo lugar. Tener una habitación en la casa donde puedan tocar cualquier cosa, jugar con cualquier cosa y nunca meterse en problemas puede hacer maravillas para usted y para aumentar la confianza de sus niños.

La primera regla para diseñar una sala de juegos puede sorprenderle: acomode todo para sus hijos. Con demasiada frecuencia, los padres crean espacios que les funcionan, pero son los niños los que pasarán más tiempo allí. Esto significa que todo en su sala de juegos debe ser fácil de acceder y guardar para los niños.

Incluso si todo lo que tiene es el rincón de la esquina de la sala de estar de su hogar, existen consejos y trucos simples que puede probar que lo ayudarán a aprovechar al máximo su espacio de juego. Probablemente nunca se verá perfecto (porque habrá niños), pero el caos organizado es algo con lo que la mayoría de los padres pueden vivir: aquí se explica cómo conseguirlo.

Primero, Designe una Estación de Comando Central

Cada habitación necesita un punto focal principal, y las salas de juegos no son una excepción. Es esencial tener una superficie para sesiones de coloración, proyectos de manualidades y juegos de mesa.

En lugar de una mesa y sillas de tamaño infantil, considere una mesa auxiliar o de café rodeada de pufs para sentarse. De esta manera, sus hijos nunca superarán el tamaño de los muebles y obtendrá más valor de ellos. Los pufs también son fáciles de transportar, deslizar y, en general, mover. Además, no se ven fuera de lugar si uno termina en un lugar diferente. Si el espacio es limitado, una mesa redonda ocupa menos espacio y es más fácil de maniobrar que un cuadrado o un rectángulo.

Hacer Uso del Espacio de la Pared

¿Tiene un niño al que le encanta jugar a disfrazarse? Cuelgue divertidos ganchos en la pared para los atuendos y deje los accesorios en una caja con tapa. Cuando es hora de montar un espectáculo, es más fácil para las manos pequeñas agarrar y reemplazar la ropa de los ganchos, lo que disminuye las probabilidades de que terminen en el piso (y también minimiza las arrugas). Este conjunto de tres ganchos de Wayfair es perfecto para una sala de juegos. Para pequeños juguetes y baratijas, este organizador de pared de Crate and Kids viene con nueve bolsillos, cada uno con un simple cierre y evita que las cosas se derramen.

Crear un Rincón de Libros

Los libros para niños tienden a llenar los armarios y estanterías rápidamente y, antes de que se de cuenta, terminan esparcidos por todo el lugar. Es fácil armar una mini biblioteca colocando estantes flotantes contra una pared o incluso la parte posterior de una puerta (también liberará espacio en su sala de juegos). Estos estantes mantienen las portadas de los libros en exhibición, por lo que es fácil para los pequeños elegir el libro que desean en lugar de hurgar en una pila que probablemente terminará en el piso.

Coloque herramientas de dibujo y juguetes pequeños en contenedores de plástico transparente con tapas.

Si quiere un poco de organización, nunca guarde crayones, marcadores o legos en contenedores o cestas abiertas. Los niños son reacios a colocar las cosas donde las encontraron, y antes de que se de cuenta, tendrá un arco iris de herramientas de dibujo esparcidos por todas. Los recipientes de plástico transparente con tapa son ideales porque los niños pueden ver lo que hay en ellos antes de abrirlos, minimizando la búsqueda loca que casi siempre conduce a un desorden gigante.

Cree un Lugar Para Arrecostarse, Leer o Simplemente Relajarse

Ya sea que se trate de una carpa de juegos moderna con forma de teepee o una simple pila de almohadas lujosas, no todo es diversión y juegos las 24 horas del día, los 7 días de la semana en la mayoría de las salas de juegos. En algún momento, los niños necesitan relajarse, y tener un punto para descansar. Al designar una esquina de la zona de descanso, es menos probable que sus hijos arrastren almohadas y mantas cuando solo quieran soñar despiertos o acurrucarse con un libro.

Hacer una Pared de Pizarra

En algún momento, los niños intentan dibujar en superficies no hechas para garabatos, como sus paredes. Resuelva esto convirtiendo una pared en un lienzo gigante y colorido para los pensamientos más profundos y las obras de arte más elaboradas de sus hijos. También es una excelente manera de ayudarlos a practicar todo, desde su ABC hasta la tabla de multiplicar.

Despejar las Cosas Regularmente

Tenga en cuenta que lo importante no es solo organizar y diseñar la sala de juegos, sino mantenerla así. Para hacer eso, comprométase a realizar barridos regulares del espacio con una bolsa de donación. Los niños superan las cosas, se aburren de ellas o simplemente dejan de jugar con ellas por todo tipo de razones. Hacer de esto un hábito mensual contribuirá en gran medida a contener el caos.

Con solo unos pocos consejos y trucos, es posible tener una sala de juegos elegante y funcional.

About the author 

Ana Connery

Ana Connery fue directora de contenidos de Parenting Group y ha editado varias revistas, incluyendo Florida Travel & Life y Cooking Light, donde supervisó la construcción del programa FitHouse. Vive y escribe desde su bungalow en Florida. Puedes encontrarla en Google+.

Artículos Relacionados